Un Día Como Hoy…
Miami 7 de Agosto de 2015
Leonel Alberto Gámez Céspedes, conocido como Leonel Oseniwo, nace un día como hoy (7 de Agosto de 1961 en Bayamo, Cuba) fue Bàbáláwo, Investigador y Escritor de las creencias heredadas de los Yorubas en Occidente, también de lo antiguo y actual de la creencia en Nigeria.
Fue Consagrado en el sacerdocio de Ifá por su Oluwo Asiwaju Orlando Mazón Hernández Ogunda Dio y su Oyugbona Benito Rodríguez Osepaure, el 20 de agosto de 1986. Leonel Oseniwo fue previamente consagrado en la Regla de Oosa por su madrina Estrella Okantomi y su Oyugbona ‘Angelita’, coronando el Òrìsà Ososi, el 30 de Mayo de 1986. Miembro del Concilio de Awoses del Alafin de Oyo, Nigeria.
Leonel Oseniwo fue uno de los primeros Bàbáláwos que sembró los cimientos de la creencia Ifá Òrìsà en México, su llegada al país azteca fue cuando entre los pocos sacerdotes de Ifá que realmente laboraban estaba el desaparecido Eduardo Padilla Baba Ejiogbe. Leonel Gámez Ifásola no se conformo con ser de los precursores de la creencia Ifa Òrìsà en México, el cruzo fronteras para investigar las diferentes formas de adoración Òrìsà que se presentaban tanto en Occidente como en África.
Fundador de la Sociedad Yoruba de México y de la Fraternidad Ifá de las Américas.
Sus investigaciones le valieron la autoría de innumerables artículos y libros digitalizados, así como una breve pero compleja lista de libros en físico como: Ebó de Tablero de Restaurado, Eewo (tabúes de cada Odu), Loruko (nombres en Yoruba según cada Odu y ocasión), entre otras obras que no fueron comercializadas formalmente.
Leonel Oseniwo fue un ser majestuoso, una persona esplendida en todos los aspectos, podríamos decir una de las grandes almas que Olódúmáré permitió que descendiera a la tierra a dotar su intelecto, y lo más importante, a compartirlo.
Su calidad humana no conocía de mezquindad, de egoísmo, un carácter parco ante las injusticias, ante las estafas dentro de la religión, un ser que a pesar de su radicalidad en cuanto se respetara la religión, sus correctos procederes y que no se engañara con esta a la gente, tenía un corazón noble que siempre escuchaba y disculpaba a los que reconocían y no repetían sus faltas.
Este periodo de vida nos valió conocer a quien fuera el Bàbáláwo más complejo en Occidente, con la misma humildad que el profesaba su amplio y único saber, con la misma humildad no tenemos otra opción que reconocer sus insuperables atributos intelectuales. Cada Bàbáláwo, cada sacerdote se caracteriza por tener ciertas virtudes, dominar ciertos aspectos sacros, pero Leonel Oseniwo tenía muchas virtudes que simplemente eran inigualables, como ser humano, como sacerdote de Ifá.
Hay muchas cosas de que hablar de este gran hombre, que partió como un guerrero, defendiendo siempre nuestra creencia, sin miedo, sin temor, un digno hijo de Ososi, uno de los más grandes hijos de Òrúnmìlà que nos dejo herramientas y vivencias que nos llevaremos a la eternidad.
Se acerca la conmemoración de sus iniciaciones religiosas, se acercan los 12 meses del arrebato de su vida, aun algunos preguntan: por que el, si él era el más grande?, porque es un mártir de Ifá, su posición religiosa como su convicción siempre fue noble, siempre fue firme, su caudal de conocimientos siempre fue envidiado, y lamentablemente hay quienes aceleran la partida de un mártir.
En la otra dimensión o en el cielo no existe el internet, nada de Facebook o demás redes sociales, no hace falta entablar una conversación con ese admirable ser que tiene misiones con Olódúmáré, con Ifá, pero también observa desde el mundo de la verdad todo lo que acontece, el sabe muy bien quienes siguieron su legado de honestidad, de emprendimiento religioso y quienes tomaron caminos de falsedad y de mentiras… cada acción trae una reacción, es una ley universal, ante los ojos de Dios no hay nada oculto.
Felicidades a su mamá, la Sra. Emma Aurora Céspedes Mujica, a su padre, el Sr. Orencio Gámez Paso, a sus hijos, a su hermano, a su tía Ofelia, primos, a todos los ahijados y amigos que aun le guardan su merecido respeto y lo honran como él solamente se lo merece. Estuvimos y estamos ante un ser demasiado grande.
Su legado es eterno, su presencia inmortal es mágica.
En nombre de la Fraternidad Ifá de las Américas, su directiva y miembros.