
Nunca olvidemos a estas personas…
Los que te ayudaron en situaciones difíciles, se preocuparon por darte el mejor consejo, con un comportamiento gentil, hasta brindarte lo que poseían y no porque les sobrara.
Los que cometieron algún error, te hirieron, pero te pidieron disculpas, recordándonos siempre que somos imperfectos. El equivocarnos y disculparnos con sinceridad es una virtud valiosa que pocos poseen.
Los que te abandonaron en situaciones difíciles, esos que te dieron la espalda, te juzgaron antes de pedirte prestados tus zapatos.
Los que te hicieron pasar por situaciones difíciles.
Nunca alberguemos rencor en nuestros corazones, simplemente sigamos la ruta con cautela y precaución. Cada día, a pesar de lo difícil que es la vida terrenal, cultivemos el agradecimiento, la nobleza y a pesar de todo nunca dejemos de hacer el bien. Agradezcamos siempre, no olvidemos que la estadía en la tierra es solo un ratito…
Fraternidad Ifá de las Américas