
‘Así como con los años aprendimos a pedirle a Olódúmáré y a los Òrìsàs nos den antes de algo: salud, vida, lo que realmente nos hace falta, y no lo que nosotros queramos, así mismo, no le demos a alguien lo que nos pida, sino, lo que realmente sepamos que necesita, y sin embargo, estemos preparados para la ingratitud. El que no ha realizado buenas acciones en su vida, seguramente no conoce lo que es el desagradecimiento. A pesar de ser decepcionados, debemos de continuar haciendo el bien, siempre ayudando al que realmente lo necesite, aunque no agradezca nuestra acción, cultivaremos las rosas que adornaran nuestra ruta a esa nube que tanto anhelamos… ♫ ten cuidado con el camaleón aunque te enseñe la cara, no te muestra el corazón ♪.’ por Rafael Molina Oluwo Ifasemu.